¿Qué es la cirugía de reconstrucción de mandíbula?

La reconstrucción de la mandíbula, también conocida como cirugía ortognática, es un método para corregir o ajustar cualquier forma de irregularidades en la mandíbula. Muchas veces, los problemas con la mordida o la alineación de los dientes pueden ser corregidos utilizando métodos correctivos de la mandíbula de tratamiento dental y de ortodoncia. Se trata de una forma especializada de corregir cualquier defecto de la mandíbula relacionado con la estructura.

Estos defectos pueden producirse de varias maneras, siendo las más comunes los accidentes de tráfico. La reconstrucción de la mandíbula es un proceso que se utiliza para corregir problemas de la mandíbula como: mordidas abiertas, dificultad para masticar, dificultad para tragar, dolores de la articulación temporomandibular (ATM), desgaste excesivo de los dientes en la mandíbula y retracción del mentón. También puede utilizarse para solucionar problemas graves de ortodoncia relacionados con la relación entre los dientes y los maxilares, incluida la corrección de submordidas y defectos congénitos relacionados con el desarrollo de los maxilares, señala la dentista Cecilia Almagro. También puede ayudar a aliviar la apnea del sueño, una afección potencialmente mortal.

Los beneficios de la reconstrucción de la mandíbula

Las personas que tienen problemas relacionados con la mandíbula, la alineación de los dientes y la asimetría facial, pueden tener dificultades para masticar, hablar y dormir, y pueden beneficiarse de someterse a una cirugía ortognática. Estos procedimientos también pueden utilizarse para corregir problemas estéticos, como una mandíbula sobresaliente o un aspecto facial desequilibrado. El uso de dispositivos de ortodoncia, como los retenedores, suele ser la mejor manera de garantizar un resultado satisfactorio.

Las condiciones que pueden ser tratadas con la cirugía ortognática correctiva de la mandíbula son las siguientes:

  • Mordida abierta, mandíbula sobresaliente o mentón retraído
  • Defectos congénitos como el paladar hendido
  • Maloclusión resultante de submordidas o sobremordidas severas
  • Apnea obstructiva del sueño, cuando fallan los métodos conservadores
  • Dificultad para tragar, masticar o morder los alimentos
  • Dolor crónico de mandíbula y puntos de la mandíbula y dolor de cabeza
  • Una apariencia desequilibrada de frente o de lado
  • Incapacidad de hacer que los labios se junten sin esforzarse
  • Respiración bucal crónica y sequedad de boca

La importancia de la reconstrucción de la mandíbula

La reconstrucción de la mandíbula es crucial para hacer ajustes y correcciones a muchos problemas dentales como:

  • Problemas graves de alineación de la mandíbula (alineación delantera y trasera, vertical y transversal)
  • Discrepancias esqueletofaciales asociadas con apnea del sueño documentada, defectos en las vías respiratorias y discrepancias en los tejidos blandos
  • Irregularidades esqueletofaciales con patología documentada de la ATM

Procedimiento de reconstrucción de la mandíbula

Existen diferentes casos, condiciones y problemas relacionados con la reconstrucción de la mandíbula y las necesidades de cada paciente son diferentes. El primer componente, y el más esencial, es una consulta con el dentista restaurador o general, un ortodoncista y un cirujano oral. La cirugía puede realizarse en un hospital o en un consultorio dental equipado, con el tipo de anestesia más adecuado para el proceso y para su comodidad. Debido a que la cirugía real se realiza generalmente en la boca, a menudo no deja cicatrices visibles. Después de la intervención, la mayoría de los dolores e hinchazones generales pueden controlarse con medicamentos recetados. Se aconseja ingerir alimentos blandos y líquidos después de la intervención.

Técnicas de reconstrucción de la mandíbula

En la cirugía de la mandíbula, el corte de un hueso se conoce como osteotomía, mientras que el procedimiento médico en la mandíbula superior e inferior se conoce como osteotomía bimaxilar, o una vía maxilomandibular. Lo óptimo es llevar a cabo la cirugía después de que se haya detenido el desarrollo, normalmente en torno a los 13-15 años en el caso de las mujeres y a los 16-18 en el de los hombres. Se utilizan placas óseas y tornillos para asegurar la nueva posición de la mandíbula, y en algunos casos será necesario un injerto de hueso. Se puede transferir hueso de la pierna, la cadera o la costilla y colocarlo con alambres temporales.

Método y tratamiento

Puede ser necesario un tratamiento de ortodoncia antes y después de la cirugía de la mandíbula, y todo el proceso puede durar varios años. Se utilizan radiografías faciales completas e imágenes por ordenador para planificar el procedimiento y mostrarle cómo mejorará su mordida después de todo el proceso. Cuando entienda el método y los beneficios es mucho más fácil que se comprometa a completar el tratamiento. La cirugía requiere anestesia general y una estancia en el hospital de 1 a 5 horas. La mandíbula se cerrará con un alambre durante la recuperación y tendrá que tomarse unas 8 semanas de descanso de cualquier actividad que pueda suponer un riesgo de traumatismo facial.

Aunque la cirugía ortognática se utiliza principalmente para corregir problemas funcionales, también puede mejorar notablemente su aspecto y su calidad de vida. La nueva tecnología proporciona ahora las herramientas y técnicas necesarias para reducir el tiempo de recuperación y maximizar los resultados. Puede ayudar a mejorar su capacidad de masticar, hablar y respirar, así como a recuperar la confianza en sí mismo.