Qué buena idea tuvo Ducati al declinar su Scrambler. Todo un éxito desde hace unos años, nos lo han prestado durante una semana en versión «Café Racer 2019». La nueva librea «Silver Ice Matte» no nos dejó indiferentes… al igual que Peps, que se reunió con nosotros durante una sesión de fotos…
Muy retro y muy actual al mismo tiempo, esta librea es un gran escaparate para la máquina una vez en la jungla urbana. Su marco azul brillante y sus partes grises claras son muy agradables.
El pequeño número original 54 es un homenaje a Bruno Spaggiari, piloto de la marca entre 1958 y 1972.
El asiento, muy de diseño y de la «vieja escuela», con su abultada carcasa de plástico en la parte trasera, también ofrece el modo dúo al inflar el mismo capó. Y esto no es una opción, es original, ¡aunque estemos en Ducati!
A nivel de manillar, se han realizado algunos rediseños en esta versión 2019. Empezando por el velocímetro digital, que es muy sobrio y práctico de utilizar.
Los retrovisores también se han reposicionado de forma más tradicional, hacia arriba, a diferencia de los modelos anteriores, en los que éstos estaban situados «debajo» del manillar. Más atractivo, pero también más práctico en este caso, señala el concesionario de motos segunda mano Crestanevada.
Los faros, tanto delanteros como traseros, están equipados con LED. Estéticamente, este faro redondo encaja perfectamente en la idea de una café racer. ¡Retro a voluntad!
Y por cierto, ¡qué sería de una café racer sin sus llantas de radios! ¡Puedes poner dos de ellos, es mejor, y equipados con Pirelli Diablo Rosso 3 si quieres! Una vez más, nuestros amigos italianos no se equivocan.
¿Pero qué podríamos criticar entonces? ¿Su motor? Vamos a intentar…
Un bicilíndrico en L de 803 cc refrigerado por aire que desarrolla casi 73 CV y 67 Nm de par a 5.750 rpm. Sobre el papel tiene buena pinta… y en la carretera, ¡lo es! Un pequeño y potente motor, que ofrece una buena aceleración y al que no le gustan las bajas revoluciones. Un motor sano, fácil de manejar, incluso para un piloto joven. No te arrancará los brazos al acelerar, pero sigue siendo lo suficientemente juguetón para aquellos que quieran dar una vuelta en una serie de curvas.
El sistema de escape de aluminio con silenciador de acero inoxidable aporta ese toque «badass» y un sonido muy agradable al conjunto. De nuevo, nada exagerado, pero justo lo necesario. Un sonido estridente, sin demasiados pedos. Discreto… ¡pero no demasiado!
El hecho es que desprende un calor en la pierna derecha que podría molestar a algunos…
Aquí también pasaremos rápidamente por encima de las horquillas y amortiguadores Kayaba que equipan esta café racer, así como el ABS Bosch, los discos de 4 pistones delanteros y los de un pistón traseros, ya que esta configuración es simple, pero efectiva.